Firmado abajo a la derecha: "J Swaminathan".
Tallas:
Marco: 47,5 × 38,5 cm | 18,7 × 15,1 in
Obra de arte: 37,5 × 28,5 cm | 14,8 × 11,2 in
El lenguaje de lo primitivo y lo sublime
Con Sin título (Tres formas), Jagdish Swaminathan destila el gesto en arquetipo. Realizada en tinta negra sobre papel, la composición presenta tres formas biomórficas que oscilan entre lo simbólico y lo subconsciente. Zarcillos irradiantes, círculos concéntricos y suaves flores de tinta surgen como diagramas rituales que evocan ojos, semillas o vida primordial. No son representaciones, sino signos: elementales, sobrios y deliberados.
El minimalismo de Swaminathan no es silencio, sino concentración. El ojo se siente atraído por la precisión de la tinta negra, la tensión entre control y espontaneidad, entre intención y accidente. La obra encarna una especie de encantamiento visual que invita a la meditación más que a la interpretación.
Ecos tribales, voz moderna
Swaminathan, figura fundadora del Grupo 1890 de la India, rechazaba tanto el academicismo occidental como el realismo nacionalista. Buscaba un lenguaje visual enraizado en lo intuitivo y lo indígena, lo que él llamaba "la mente mítica". Esta obra capta ese ethos: una abstracción moderna que resuena con el arte tribal, el simbolismo tántrico y la geometría sagrada. Las formas no hablan de emoción personal, sino de presencia universal.
En Sin título (Tres formas), la difusión de la tinta se convierte en una metáfora de la transmisión: de la memoria, del mito, de la energía. Cada marca es a la vez deliberada y libre, producto de la disciplina y la entrega.
Declaración de un coleccionista
Esta rara composición firmada por Swaminathan es emblemática de su visión pionera. Más que un dibujo, es una reliquia visual que canaliza la filosofía de un artista que fusionó lo primitivo y lo vanguardista. Por su pureza de trazo y su fuerza conceptual, es a la vez un documento histórico y una declaración estética intemporal.
Tanto si se considera una abstracción caligráfica como una cartografía espiritual, esta obra ejemplifica el legado perdurable de Swaminathan: el arte como invocación, la forma como significado, el silencio como presencia.