22: Willem Dooijewaard - Retrato de una chica asiática, 1913

Detalles
Firmado y fechado arriba a la derecha.
Este exquisito dibujo a carboncillo, Retrato de una niña asiática (1913), es un testimonio de la maestría de Willem Dooijewaard en el retrato. Con una técnica depurada, Dooijewaard capta la esencia de su retratada con notable profundidad y sensibilidad. La mirada contemplativa de la joven, junto con el delicado juego de luces y sombras, desprende una sensación de tranquila dignidad e introspección.
Realizada con finas gradaciones tonales, esta obra pone de relieve la excepcional habilidad del artista para retratar la textura de la piel, las telas y las intrincadas joyas. El suave efecto de claroscuro realza la tridimensionalidad de la composición, creando un realismo casi fotográfico. Firmado y fechado en la esquina superior derecha, este dibujo es un ejemplo raro y significativo de las primeras obras de Dooijewaard, y ofrece una visión de su profunda fascinación por la cultura asiática y el retrato.
Procedencia
Colección privada, Europa.
Condición
Buen estado vintage con algunos signos de desgaste. Sin enmarcar.
Willem Dooijewaard (1892-1980) fue un pintor holandés conocido por sus viajes por Asia y sus representaciones de culturas indígenas. Influido por el postimpresionismo y el expresionismo, pintó retratos y paisajes vibrantes, captando la esencia de las gentes y los lugares que encontraba. Sus viajes le llevaron a Indonesia, Mongolia, China y Japón, donde se sumergió en las tradiciones y estilos artísticos locales.
Las obras de Dooijewaard reflejan su profundo aprecio por la cultura asiática, y a menudo retratan bailarinas balinesas, jinetes mongoles y serenas escenas rurales. Su arte obtuvo reconocimiento internacional y se asoció estrechamente con otros artistas expatriados en las Indias Orientales Holandesas. Hoy en día, sus cuadros siguen siendo muy apreciados y ofrecen una vívida visión de la vida de principios del siglo XX en las regiones que exploró.
